Analizando la realidad de la
comuna 13 en Medellín constatamos que la situación es precaria, dado que
existen estructuras criminales altamente fortalecidas con bandidos, armas y
muchísimo dinero. Lo que nos lleva a pensar que combatirlas requiere de acciones
más contundentes, diferentes a las que hasta ahora ha desplegado la fuerza
pública. Sin contar la infinidad de capturas que se han presentado, pero que
resultan ineficaces ante el universo jurídico, toda vez que las autoridades
carecen de elementos probatorios para judicializar al criminal. ¡Está jodida la
cosa!
Y es que padecer más de cinco
combos dentro de una misma comuna es un problema mayúsculo, tal y como ocurre
en la 13, ya que ello exige por parte de la policía un plan de persecución
impecable y articulado con el ejército para neutralizar a los bandidos. Pero,
la tarea no es sencilla, mucho menos con los hechos que últimamente se han
venido presentando. No siendo poco, en la comuna 12 ocurre algo semejante, puesto
que, en este sector, de lo que va corrido del año han sido asesinadas 24
personas, convirtiéndose en la tercera zona de la ciudad en donde más hechos
violentos se presentan.
Para la muestra un botón:
tristemente presenciamos como asesinaron por el barrio Cristóbal a un joven con
un futuro promisorio en el fútbol. Lo más detestable del asunto es que, al
parecer se trató de un crimen por “equivocación”, lo que agrava muchísimo más
la situación: ahora ya van encendiendo a bala al que sea, sin importar si es o
no es. ¡Miserables asesinos!
Por otra parte, en las comunas en
donde han ocurrido más homicidios son: La Candelaria (comuna 10), con 33
muertes; La América (comuna 12), con 24 crímenes; San Javier (comuna 13), con
23 asesinatos; el corregimiento de San Cristóbal, con 20 y Robledo (comuna 7),
con 19 asesinatos. Cifras que, de lejos, son alarmantes y repugnantes. Las balas callan voces, apagan ilusiones,
destruyen familias y condenan a nuestros jóvenes, porque son estos quienes
fungen como conejillos de indias de los verdaderos bandidos.
¿Qué se puede hacer al respecto?
Lo primero, incrementar el pie de fuerza y hacer uso de los militares más
especializados para derrotar a las estructuras fuertemente organizadas. Dicho
trabajo debe articularse con la policía metropolitana, donde a su vez se dé
apertura a una red de apoyo ciudadana para recuperar la confianza entre el
conglomerado social. Una de las finalidades primordiales del Ejército Nacional
es la defensa de la soberanía, la independencia, la integridad del territorio
nacional y del orden constitucional. Tal cual, presenciamos que lo anterior se
está viendo gravemente lesionado por estructuras bastante fortalecidas. Además,
es menester quitarles la renta y el dinero; ese es el camino para destruir a
tantos pillos.
Ahora bien, lo segundo debe
consistir en profundizar con mayor rigor y compromiso sobre programas sociales
de deporte, arte, recreación y cultura para que nuestros jóvenes no se vayan a
delinquir, pues hay que mantenerlos ocupados y ello no lo logramos únicamente
con la oferta educativa. Hay que ir más allá. Verbigracia, debemos
replantearnos la conveniencia de instaurar una jornada única escolar que sea
integral con lo ya descrito.
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